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“Los 7 Pecados Políticos Capitales de la Campaña de Johnny Araya”

Este artículo/análisis tiene como propósito identificar 7 momentos críticos de la Campaña del candidato presidencial por el Partido Liberación Nacional, señor Johnny Araya Monge, que pudieron haber repercutido negativamente en las encuestas y por ende la intención de voto en las elecciones del 2 de febrero y que trajo como consecuencia el verse en un segundo lugar con un 29, 59% de los votos emitidos válidamente (1,36% menos que Luis Guillermo Solís del PAC) y una segunda ronda. Quizás el lector (costarricense) pueda coincidir con el autor sobre el peso de estos momentos para la Campaña y por ende en el resultado electoral o quizás pueda pensar que faltaron otros.


A manera de introducción, debo confesar que originalmente la falta de peso político como figura dentro del PLN estaba incluida como uno de “los 7”. Pero en realidad podría verse como un rasgo de la figura del candidato más que de la Campaña en sí, que arrancó para él en junio cuando el Partido Liberación Nacional lo proclamó candidato presidencial. Y es que recordemos que anterior a esto, la mayoría de los diputados de la fracción del PLN le habían dado su adhesión a la candidatura (fallida) de don Rodrigo Arias Sánchez, hermano del expresidente y Premio Nobel de la Paz Oscar Arias. Si bien este acontecimiento pudo verse como un reflejo de esa falta de peso, se puede entender que el apellido Arias así como el de Figueres (José María, el cual también “sonó” fuerte como un posible candidato del PLN) todavía tienen mayor arraigo que el de Araya Monge (a pesar de ser sobrino del expresidente Luis Alberto Monge). Asimismo, aunque en varios momentos de la Campaña, Johnny Araya asumió la postura de “he dicho” o “he criticado” en alusión a los yerros del Gobierno (Liberacionista) de Laura Chinchilla Miranda cuando se le interpeló en los debates, en realidad esas posiciones de crítica, si es que las tuvo (no recuerdo) nunca tuvieron eco en la opinión pública.


Lo que es cierto es que don Johnny Araya está las puertas de ser el candidato de menor peso político electoral que ha tenido el PLN en muchísimos años (por decir algo, puede ser que de la historia del PLN); y de no ganar la segunda ronda pactada para el 6 de abril contra Luis Guillermo Solís del Partido Acción Ciudadana, sería el peor candidato del Partido.


Empecemos. Aclaro, el orden en que se colocan no refleja relevancia o secuencia cronológica.


La renuncia de dirigentes cartagineses. Hacia la mitad de diciembre, un grupo de dirigentes de la zona de Cartago, presentó su carta de renuncia al PLN y dio su adhesión al Frente Amplio. En los argumentos expuestos se identificó una clara fricción ideológica y política interna; de hecho, una de las dirigentes que firmaron la carta (exSubsecretaria General del PLN) dijo a los medios que el candidato no había cuidado a la dirigencia con lo que evidenció que las cosas no estaban también dentro del PLN. Que yo sepa, JAM nunca reaccionó o puso atención a los argumentos. Resultado: sorpresa y decepción el 2 de febrero en la noche, al ir conociendo los resultados emitidos por el Tribunal Supremo de Elecciones. Al día siguiente, el candidato tuvo que reconocer que algo pasó en la estructura territorial. Apatía, indiferencia, falta de termómetro territorial hacia sus bases en todo el país irremediablemente lo terminaron colocando en el segundo puesto. Y para muestra un botón: el título de La Nación del 7 de febrero: “Tropiezo electoral de Johnny Araya revela fricción interna del PLN”.


Su Campaña “Contráteme”. Según las encuestas de Unimer, para setiembre de 2013 Araya contaba con una intención de voto cercano al 40% (con margen de error); para noviembre, en ese entonces ya los spots de “Contráteme” tenían un par de semanas de estar al aire, la intención de voto apenas llegaba al 20%. El lema no entusiasmó, no le llegó al segmento principal que eran los indecisos o apáticos; más bien fue otra oportunidad para que las redes sociales se calentaran y para que algunos medios de prensa apuntaran al Barrio Chino como un desacierto arquitectónico y turístico. Asimismo, Luis Guillermo Solís, como candidato del PAC, aprovechando la coyuntura y en uno de sus primeros spots lo calificó como un Alcalde de “cuarenta cuadras a la redonda” entre otras críticas que le hizo a la labor de 22 años de Araya en el ayuntamiento josefino (Ejecutivo Municipal 91-98, y luego cuando se creó la figura de Alcalde de 1998 a junio de 2013).


El resultado era predecible: durante los primeros días de diciembre, el candidato decide cambiar de empresa publicitaria y tuvo que dar un giro hacia el “fervor liberacionista”. Pero el daño estaba hecho: fue una campaña que terminó socavando su imagen no sólo política sino “creando” más electores que jamás votarían por él, según lo iban confirmando las encuestas.


Errores de los Gobiernos del PLN. Como que al candidato lo “picó” el mosquito de la caída en las encuestas; en varios foros de discusión y giras antes de la tregua electoral e inicios de enero de 2014, Araya enfocó sus baterías a lo que él llamó errores cometidos en los gobiernos del PLN. En una actividad del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos habló de fallos en infraestructura y señaló en “la platina” como un símbolo de ineficiencia en obra pública; en una gira a Guanacaste aceptó que había un incremento en la pobreza, en la falta de empleo y la desigualdad. ¿Cuál fue el problema de asumir esta posición? Durante casi todo el 2013, el candidato tuvo un desmarque silencioso del Gobierno Liberacionista conducido por Laura Chinchilla; a mediados de mayo, a raíz del escándalo que envolvió a la Presidenta por el uso de una avioneta para fines privados que estaba ligada al narcotráfico, JAM simplemente atinó a decir que esperaba que los votantes se fijaran en el candidato y no en el partido.


No acuerpar sólidamente (con sus logros y yerros) como generalmente lo hace un candidato oficialista y por el contrario asumir un “mea culpa” fue tomado como una pose muy poco creíble. No funcionó. Incluso, durante los debates televisados durante enero en los que sus principales contrincantes (según las encuestas) criticaron la labor del Gobierno y lo señalaron como una figura del continuismo, Araya se defendía diciendo que él nunca participó de este Gobierno, ¿entonces? Ahora bien, nunca se le escuchó admitir que hubiera cometido algún error durante sus 22 años de gestión en la Municipalidad de San José. Tomando en cuenta que durante esa cantidad de años, ha habido 3 gobiernos liberacionistas que contabilizan casi que 12 años (a menos de 3 meses de finalizar el actual), y él ha señalado errores, ¿será posible que en 22 años de gestión municipal no haya cometido uno solo?


El famoso “casado de Johnny Araya”. Quizás el acontecimiento que más generó ruido en las redes sociales ocurrió en octubre de 2013, durante la entrevista en formato de preguntas cortas que le hizo la periodista Auxiliadora Zúñiga (por cierto, despedida en Noviembre) del periódico La Teja. Me parece que a todas luces este acontecimiento tuvo una proporción mediática que ni Araya ni su comando de campaña supo medir; no sé si por ser La Teja un medio de corte amarillista el candidato no tomó en serio las implicaciones de sus respuestas; lo cierto es que las redes sociales lo destrozaron. No saber o ni siquiera aproximarse al precio de un casado, de una caja de leche, de la tarifa de buses de su vecindario, por más simples que parecían, caló al ciudadano común y corriente que tiene que enfrentar diariamente con estos elementos de subsistencia. Como dirían en las redes: “FAIL”; chota, mofa, sarcasmos fueron las principales reacciones de ese “pecado capital”. Otra factura cobrada en la intención de voto.


Ausencia de caras nuevas. Aquí no hay mucho que decir, simplemente que con la campaña de Araya queda de manifiesto que no hay figuras frescas y relevantes que generen empatía con las nuevas generaciones. La misma dirigente (exSubsecretaria General del PLN) de Cartago que presentó su renuncia calificó a Bernal Jiménez, Presidente de la agrupación, como “dinosaurio político”. No perdamos de vista que en relación con los llamados “diputados nacionales”, Araya se apoyó en figuras hartamente conocidas (quizás no tanto el exmagistrado Carlos Arguedas). Una nota del medio electrónico InformaTico.com lo reflejó así en uno de sus titulares del 25 de agosto de 2013: “Varios de los candidatos ya han pasado por la Asamblea Legislativa, han sido ministros, presidentes de instituciones autónomas, alcaldes, regidores o son familiares del candidato presidencial Johnny Araya.”

Esta carencia de figuras nuevas fue casi que la punta de lanza para José María Villalta-del Frente Amplio- con su frase “los mismos de siempre”. Para el 02 de febrero, casi un 8% del padrón electoral lo componían votantes nuevos (alcanzando los 18 años); y según datos del Boletín Estadístico de la Dirección Ejecutiva del Tribunal Supremo de Elecciones, para setiembre del 2013 prácticamente un 30% del padrón nacional estaba compuesto por ciudadanos menos a 30 años. ¿Error estratégico?, ¿menosprecio? No sé, lo cierto es que el PLN se olvidó del relevo generacional.


Ausencia a debates. Es cierto que un candidato no tiene por qué asistir a toda actividad de debate o discusión que se le invite, pero tampoco se puede despreciar los foros o espacios que distintos sectores organicen para escucharlo. Desde setiembre, se empezó a detectar como tendencia la ausencia de JAM a estos foros, la mayoría fueron auspiciados por universidades (ULACIT, UCR y ITCR), pero sí asistió a los organizados por cámaras empresariales. Según las razones emitidas por él y su comando de campaña, las ausencias estaban justificadas por sus giras y porque había que priorizar su agenda. Quizás la pifia más grande de asumir esta postura (correcta o no) es que ya estaban los spots publicitarios de “Contráteme” y muchos sectores empezaron a decir que Johnny Araya estaba rehuyendo a las entrevistas de trabajo. En momentos en que la intención de voto a favor de su candidatura seguí en su tendencia a la baja, el “ruido” mediático que estas ausencias ocasionaron le fue sumando a la imagen negativa.


Las llamadas “caravanas de la Salud” (ver nota al pie del artículo sobre este concepto). Buena intención por el fondo, por la forma una pifia. Mostrar interés por los sectores sociales más vulnerables en tiempo de campaña electoral siempre es sospechoso; pero cuando se les lleva asistencia médica ya es algo fuera de tono. Las llamadas “Caravanas de la Salud” promovidas por la esposa del candidato, la señora Sandra León, fue sólo una actividad con fines proselitistas. Una vez que el PLN fuera notificado por medio del máximo organismo electoral de que no podían utilizar identificaciones alusivas al Partido, pues sencillamente se dejaron de hacer. El organismo en su resolución –a mediados de octubre- dejó la puerta abierta a que la esposa del candidato las llevara a cabo por iniciativa propia. Otro enjambre de enojo y de críticas hacia la Campaña de Araya Monge.


Basado en estos acontecimientos, como que Octubre de 2013 fue el “mes maldito” para la Campaña de Araya Monge, pues en esos 30 días se suscitaron 3 de los 7 “Pecados Políticos Capitales”; y de no ganar la Presidencia de la República, será el mes para nunca olvidar. Como se indicó al inicio, puede haber otros momentos críticos o fatídicos que incidieron negativamente en la campaña e imagen del candidato liberacionista, como su postura de eliminar los exámenes de bachillerato, el haber afirmado en un debate de la Universidad Nacional, al que sí asistió, “no sabemos quiénes son los pobres de Costa Rica, hay listas de beneficiarios, pero no hay una identificación de quiénes son y dónde están los pobres", el haber aparecido en el camerino de la Selección Nacional de Costa Rica allá en Jamaica, celebrando con los jugadores la clasificación al Mundial de Brasil, y que le generó como apodo “el colado”; en fin, puede el lector sumar una tras otra, tras otra. Lo que sí es cierto es que hoy son don Johnny Araya Monge y don Luis Guillermo Solís quienes se enfrentarán el próximo 6 de abril en una segunda ronda, y hay que este servidor va a IR A VOTAR.



NOTAS:

- Tomado de la página web de la Secretaría de Salud de la República de México:

UNIDADES MÉDICAS MÓVILES (CARAVANAS)

El programa Caravanas de la Salud tiene como misión “acercar la oferta de la red de servicios de salud con criterios de calidad, anticipación, de manera integral y resolutiva, mediante equipos itinerantes de salud a la población que habita prioritariamente en las microrregiones de menor índice de desarrollo humano y marginadas con alta dispersión, todos ellos carentes de atención médica oportuna debido a su ubicación geográfica, dispersión y/o condiciones de acceso, en las cuales resulta muy complejo y en algunos casos imposible, el establecimiento en el corto plazo de unidades médicas fijas”.

¿Le suena familiar?


- Para el lector que no esté familiarizado con lo que es un “casado”, le comento que es un platillo de amplio consumo que generalmente contiene ingredientes principales como el arroz, frijoles, ensalada, maduro (que es un tipo de plátano o guineo frito) y que como guarnición principal se escoge entre el pescado, pollo, carne de res o cerdo (chuleta) según el menú de los restaurantes.


Artículo publicado el 11 de febrero en http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article63993

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