De cómo la Universidad Política le da una lección a la Escuelita PAC
A menos de 48 horas de la elección del Directorio Legislativo, la fracción del PAC estaba en proceso de consulta, preguntando a sus tres candidatos a la Presidencia cuáles eran sus propuestas de trabajo. Suena risible, ridículo de parte de la fracción oficialista, pero fue un hecho público. En vez de cerrar filas en torno a una sola candidatura y a partir de ahí buscar los consensos para mantener el poder, la escuelita PAC estuvo en sesión todo el día miércoles. De hecho, algunos diputados publicaban en redes sociales fotos de esa sesión e incluso las preguntas que le estaban haciendo a los candidatos. Horas después, anuncian que luego de una votación, designan al excandidato presidencial y uno de los fundadores, Ottón Solís como su “candidato oficial”; pero suave, la escuelita no sólo decidiría luego de una intensa evaluación de propuestas a quién apoyarían, sino que ese apoyo estaba condicionado a que en menos de un día Solís lograra conseguir el respaldo de 29 votos para asegurar la Presidencia. Mientras tanto, otro de los diputados del oficialismo, Víctor Hugo Morales –que no es bienvenido a las reuniones-, ya había anunciado días atrás que haría todo lo posible para que Solís no llegara a la Presidencia del Congreso. Con este escenario es cómo la escuelita pretendía seguir en el poder del Congreso.
La respuesta de las demás fracciones ante tal situación no se hizo esperar: por un lado el Frente Amplio, su mayor aliado durante este primer año de legislatura, no tomó en serio la candidatura de Solís, y por otro lado, las demás fracciones, ante la indecisión y división de la fracción oficialista, ya habían decidido semanas atrás buscar una alianza que les asegurara prácticamente “mesa gallega” el 01 de Mayo. En Política no hay sillas vacías.
¿Por qué entonces el PAC insistió en jugar en y a la escuelita, con preguntitas y exámenes, en vez de jugar en la universidad política?
En menos de 24 horas, el PAC pasó de Ottón Solís a Henry Mora, candidatos que no generaban consenso. Solís desde antes de llegar a la Asamblea ya se había encargado de desterrar cualquier acercamiento con el PLN, tachando a todo partidario de corrupto; además la dialéctica de austeridad y de recortes ya estaba más que desgastada; con don Henry Mora, pues ya estaba más que confirmado que algunos diputados no lo querían; y no debemos olvidar que la Sala Cuarta lo colocó en la historia legislativa como el Presidente legislativo que cometió actos contrarios a la Constitución. Quedaba nada más la diputada Marcela Guerrero; pero lamentablemente ella no gozó de la “bendición” del Ejecutivo, aunque a lo interno de la Asamblea parecía que podía tener el apoyo suficiente para quedarse en la Presidencia.
El PAC parece que en 15 años de existencia no se ha dado cuenta que la esencia de la Política es la búsqueda del Poder, de la negociación, de los pactos y alianzas políticas, pero no como simple demostración de fuerza, sino en la dinámica parlamentaria, llevar a cabo la discusión y posible aprobación de los proyectos de ley de interés; ¿será que el Partido se quedó con el millón trescientos mil que obtuvo el Presidente en segunda ronda? Ese caudal que no le correspondía a la fracción. O quizás bajo la idea de que “ellos son los buenos, y los demás los malos”, la fracción se quedó a la espera a que las demás fracciones tuvieran que acercarse a negociar.
Por eso es que el resultado del 01 de Mayo no debe extrañar ni al PAC ni a su aliado FA: pérdida del poder en el Directorio y en las comisiones legislativas más estratégicas, ni el aparente resurgir del PLUSC (PLN+PUSC), todo “cortesía” de la escuelita PAC. Y para poner la cereza en el pastel de la escuelita en la que está el oficialismo, el propio Partido está pidiendo la cabeza de una de sus diputadas que por iniciativa, y quizás un poco más consciente a formar parte de la universidad política, llega al Directorio.
Recordemos el lema de campaña del Partido: “con Costa Rica no se juega”, pero parece que el PAC si lo está. Por favor, dejen la escuelita y pónganse a gobernar.
